
Corazón de Madre Estamos en las praderas africanas, donde cada día cada uno de los seres representativos de la vida salvaje lucha por sobrevivir, donde la batalla entre el depredador y la presa nunca termina. Cada uno de ellos vive su diario acontecer con dignidad, sabe vivir disfrutando sus placeres y sabe morir cuando pierde su digna batalla. De todas las facetas de la vida salvaje, la más regocijante es la que cumplen a toda cabalidad las madres; al convertirse en madre se pierde toda fiereza, toda brutalidad animal y no son otra cosa que madres abnegadas y dulces; pero su dulzura se transforma en fuerza brutal y desmedida cuando les toca defender a la cría de sus entrañas porque la defienden con su propia vida. Una mañana de fresco amanecer en las sabanas de Sur África, dos madres cumplían sus labores maternales; una leona, Mota, y una mona babuino, Zipa; ambas orgullosas de su respectivas crías a las que no les escatimaban ningún cuidado. Toda aquella tranquilidad se term